Val McDermid es una novelista poco conocida, cuyas novelascompararía con las de otras escritoras británicas de novela negra como P.D. James o Elizabeth George (por cierto, creo que no he comentado nada de ellas en este blog, pero sólo es porque ya había leído muchos de sus libros antes de empezarlo, así que aprovecho para dejar constancia de que están entre mis favoritos).
Y volviendo a la novela de esta semana, se puede decir que este libro está formado por dos partes totalmente diferentes. En la primera parte asistimos a un juicio por el asesinato de una joven de una pequeña aldea donde se nos cuenta con detalle todo el procedimiento policial y sobre todo judicial. En la segunda parte, el caso sale a la luz años después cuando una periodista va a escribir acerca del tema, y nos encontramos con sorpresas inesperadas.
La historia está bien escrita y consigue enganchar. Muy buena la ambientación y los personajes.
Una escritora a tener en cuenta por los aficionados a este género que aún no la conozcan.
Y volviendo a la novela de esta semana, se puede decir que este libro está formado por dos partes totalmente diferentes. En la primera parte asistimos a un juicio por el asesinato de una joven de una pequeña aldea donde se nos cuenta con detalle todo el procedimiento policial y sobre todo judicial. En la segunda parte, el caso sale a la luz años después cuando una periodista va a escribir acerca del tema, y nos encontramos con sorpresas inesperadas.
La historia está bien escrita y consigue enganchar. Muy buena la ambientación y los personajes.
Una escritora a tener en cuenta por los aficionados a este género que aún no la conozcan.
Sinopsis
Invierno de 1963, dos adolescentes desaparecen en Manchester. En diciembre de ese mismo año, en una aldea perdida de Derbyshire, desaparece Alison Carter, otra jovencita de trece años. Para el inspector George Bennet, es el principio de un caso terriblemente angustioso: un crimen sin cadáver, un misterio indescifrable entre personajes impenetrables cuyos secretos muy bien guardados no salen a la luz hasta muchos años más tarde.
Cuando décadas después el inspector Bennet decide contar esta historia a la escritora Catharine Heathcote, lo hace convencido de que determinadas historias deberían ser contadas, recordadas. Sin embargo, en el momento en que el libro está prácticamente terminado, es el mismo Bennet quien inexplicablemente presiona a Heathcote para que no siga adelante. Acaba de recibir una información que pone en peligro la base de su existencia. Semejante actitud obliga a Catherine a no aceptar presiones y a llegar hasta el fondo del caso sean cuales sean las consecuencias.
Lugar de ejecución -historia absorbente ambientada en una comunidad endogámica, cerrada-, indaga, descubre y destroza la línea divisoria entre realidad y ficción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario