No había oído hablar de esta novela deJavier Moro, pese a ser ganadora del Premio Planeta, pero hace unos días una buena amiga y seguidora del blog me la recomendó para el viaje a Brasil y debo decir que ha sido una muy buena recomendación (como las demás que suele hacerme, por otro lado).
Se trata de una novela que, como el propio autor dice, está basada en personajes y acontecimientos reales, que no cabe duda lleva tras sí un ingente trabajo de documentacion y que, pese a ser muy "densa" en su contenido, está escrita de forma muy amena y sencilla y resulta una lectura agradable e interesante.
Nos cuenta la vida de Pedro I, el primer emperador de Brasil, que independizó el país de Portugal, un personaje muy de novela por méritos propios.
Hoy precisamente hemos visitado Petrópolis, ciudad fundada por su hijo Pedro II en el lugar donde él inició la construcción de su palacio de verano, así que la lectura no podría haber sido más apropiada.
En cualquier caso, me parece una muy buena novela histórica, que cualquier amante de este género disfrutará sin duda.
Se trata de una novela que, como el propio autor dice, está basada en personajes y acontecimientos reales, que no cabe duda lleva tras sí un ingente trabajo de documentacion y que, pese a ser muy "densa" en su contenido, está escrita de forma muy amena y sencilla y resulta una lectura agradable e interesante.
Nos cuenta la vida de Pedro I, el primer emperador de Brasil, que independizó el país de Portugal, un personaje muy de novela por méritos propios.
Hoy precisamente hemos visitado Petrópolis, ciudad fundada por su hijo Pedro II en el lugar donde él inició la construcción de su palacio de verano, así que la lectura no podría haber sido más apropiada.
En cualquier caso, me parece una muy buena novela histórica, que cualquier amante de este género disfrutará sin duda.
Sinopsis
Convertido en emperador de Brasil a los veintitrés años, Pedro I marcó con su huella la historia de dos continentes. Desmedido y contradictorio, las mujeres fueron su salvación y su perdición: mientras su esposa, la virtuosa Leopoldina de Austria, lo llevó a la cumbre, su amante, la ardiente Domitila de Castro, lo arrastró a la decadencia. Cuando el inmenso Brasil se le hizo pequeño y el poder dejó de interesarle, puso su vida en juego por aquello que creía justo. Y alcanzó la gloria.
Con la belleza exuberante del trópico como telón de fondo, Javier Moro narra con pasión por el detalle la prodigiosa epopeya del nacimiento del mayor país de Sudamérica.
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