La noche en que Frankenstein leyó el Quijote (Santiago Posteguillo)

Santiago Posteguillo es conocido sobre todo por sus novelas ambientadas en la historia del Imperio Romano, de las que he oído muy buenas críticas, pero con las que todavía no me he atrevido; me da un poco de pereza por su extensión.
Este libro no tiene nada que ver con ellas, pero su lectura ha hecho que me anime un poco más a leerlas, pues me ha gustado  mucho como escribe este autor.
Se trata de una serie de relatos (o más bien podríamos llamarlos ensayos) cortos en los que nos explica anécdotas relacionadas con los libros y sus autores, que abarcan una amplia gama de géneros, épocas y situaciones.
Algunas ya las conocía, pero la mayoría no. Y además de resultar interesantes en sí mismas, me gusta la forma que tiene de contarlas, casi como si cada una fuera una "mini novela".
Muy recomendable.

Sinopsis

La historia de los libros no se agota en el texto, más allá de las páginas impresas nos aguardan sus autores, con su carácter, sus caprichos, sus genialidades, sus esfuerzos, sus penurias y alegrías. El relato que el escritor y el editor decidieron entregar a imprenta está rodeado por decenas de historias que los biógrafos y los estudiosos de la literatura persiguen, recomponen y recogen. Incluso los propios libros, como objetos, tienen sus secretos: los textos anónimos, el proceloso camino hacia la publicación, las correcciones y enmiendas, los altibajos de su composición...

De este magma inagotable de situaciones Santiago Posteguillo ha seleccionado un compendio representativo de la trastienda de la literatura. Sabremos quién inventó la ordenación alfabética, quién escribió las obras de Shakespeare, qué autor burló el índice de libros prohibidos de la Inquisición, qué relación tiene Charles Dickens con la piratería informática, qué podemos encontrar en la esquina de Pérez Galdós con Ángel Guimerà, qué papel jugó la rebelión de un hobbit en la carrera política de Eisenhower, o quién asesinó a Sherlock Holmes. Un paseo divertido y distinto para ver con ojos renovados la mejor literatura de siempre.