Hace ya bastante tiempo que descubrí casualmente a César Pérez Gellida, ya que no era un autor muy conocido, o al menos yo no había oído hablar de él en ningún foro, y lo cierto es que me encantó. Desde entonces he leído casi todos sus libros, y en ningún momento me ha defraudado. Cada libro me gusta tanto o más que el anterior, así que no me extraña que esta novela en concreto haya sido una de las más vendidas en la pasada feria del libro de Madrid. Al final, tiene el reconocimiento del público que creo que se merece.
En esta ocasión cambia un poco de registro, y nos cuenta un asesinato no desde el punto de vista de quienes lo tienen que investigar, sino de quienes lo han cometido. Vamos conociendo las motivaciones de los asesinos narradas en primera persona y aún así al final se saca un giro de la manga y nada es lo que parece en un principio.
Una novela que no te deja respirar.
Y además me ha gustado mucho que la acción transcurra en Urueña, un precioso pueblo que tuve oportunidad de visitar este verano y al que de alguna manera he vuelto al leer esta historia, ya que la ambientación está muy lograda.
Me sigo declarando fan incondicional de este autor.
Hay astillas del pasado que conviene no extraer jamás.
Dos amigos de la niñez con una deuda pendiente.
Un forzado reencuentro en la amurallada localidad vallisoletana de Urueña.
Álvaro, un exitoso escritor, y Mateo, un crucigramista en números rojos, acabarán atrapados en el caótico trazado medieval de la villa y bajo una impenitente cencellada. Ambos serán parte de un macabro juego en el que la sed de venganza los llevará a tomar decisiones que condicionarán sus vidas en el caso de que alguno logre superar la jornada.
Astillas en la piel es un absorbente thriller psicológico en el que se confirma que César Pérez Gellida es el auténtico mago del engaño de nuestras letras. Una novela con una trama adictiva y asfixiante al más puro estilo cinematográfico y al servicio de la literatura de calidad.
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