Primera novela de Vicente Vallés, conocido de sobra por su labor como periodista y que se estrena en la ficción, aunque hay que decir que parte de la novela tiene poco de ficción: por un lado, hay sucesos reales y, por otro lado, hay personajes que, si bien tienen otro nombre por aquello de que no puedan decir nada, son perfectamente reconocibles en dirigentes actuales.
La novela al final resulta en una ficción que podría ser perfectamente real, que nos presenta a espías de la vieja escuela y a espías modernos, con métodos totalmente diferentes unos de otros, que se complementan perfectamente. Resulta todo bastante creíble y sabe mantener la atención y la tensión sobre todo al final, cuando ya queda poco y no tienes idea de cómo va a poder terminarlo, y la conclusión te parece bastante lógica.
Me ha gustado y he disfrutado leyéndola. Aprovecho para dar las gracias a una buena amiga y compañera de lecturas por prestármela.
En 1922, el nacimiento de un niño en Nueva York cambiará la historia del mundo un siglo después.
Los servicios de inteligencia soviéticos diseñan para ese bebé el más audaz plan de espionaje jamás imaginado. Unos años más tarde, Lavrenti Beria, el sanguinario jefe de la policía bolchevique, presentará ese plan a Stalin, que se apropiará del operativo y lo convertirá en una misión personal y extremadamente secreta, advirtiendo a su ejecutor algo muy importante: no se le puede escapar de las manos. Será la Operación Kazán.
Ni Beria ni Stalin vivirán para ver cómo aquel niño, convertido en un espía, culmina su ambicioso proyecto, latente durante lustros.
Ya en nuestros días, la llegada al poder en Moscú de un agente del KGB, insaciable y temerario, relanzará la Operación Kazán, para sabotear a Occidente y recuperar para Rusia la condición de superpotencia. Pero, ¿tendrá éxito? ¿Conseguirá el líder ruso su verdadero objetivo de controlar Estados Unidos desde el Kremlin? ¿Se cumplirá la orden de Stalin o se le escapará de las manos?
Los protagonistas de Operación Kazán recorren desde la Revolución Rusa en 1917 hasta las elecciones americanas del siglo XXI, pasando por los horrores de la Segunda Guerra Mundial, el desembarco de Normandía, la Guerra Fría, la caída del Muro de Berlín en 1989, el colapso de los regímenes comunistas en los años 90 y la actual injerencia rusa en las democracias occidentales. ¿Qué papel jugarán los jóvenes espías Teresa Fuentes, del CNI español, y Pablo Perkins, de la CIA, en la fase decisiva de esta intriga?
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